estática
Los materiales que poseen una resistencia eléctrica considerable entre ellos, generará continuamente la electricidad estática en cualquier entorno. Ésta se puede volver un problema cuando se acumula debido a las condiciones climáticas y ambientales.
En una fábrica hay que tener mucho cuidado con eso, ya que los trabajadores están propensos a recibir desagradables descargas eléctricas, además de que las fibras y tejidos se pueden pegar a la maquinaria, produciendo chispas en el proceso. Más aún en áreas que tengan y manejen gases inflamables, sin duda será muy peligroso; es importante saber controlar la humedad relativa.
Las empresas que tengan áreas de sistemas y ordenadores deben tener muy en cuenta la saturación en el ambiente, y es que ésta incide directamente en fallos de circuitos electrónicos; los inconvenientes pueden ir desde depósitos de polvo en cabezas lectoras, hasta rompimientos en soportes de almacenamiento magnéticos.
Un óptimo aumento de humedad relativa en el ambiente puede evitar la acumulación de cargas electrostáticas, eso no significa que las elimine por completo pero sí habrá una reducción significativa; esto se puede hacer mediante la instalación de humidificadores en lugares estratégicos de la fábrica. Hay que saber que si el aire presenta una humedad relativa inferior al 45%, entonces la acumulación de cargas estará garantizado, por ello es fundamental el control adecuado de la humedad.
También para reforzar la eliminación de las cargas en superficies, sobre éstas se pueden colocar láminas muy delgadas de humedad, así las cargas se desplazarán a tierra. Es necesario considerar que los tejidos sintéticos y la lana necesitan humedades relativas altas. Solo los dispositivos de humidificación de calidad lograrán un adecuado nivel de humedad en las fábricas, sobre todo aquellas que posean sistemas de cómputo y textiles.
