Los sistemas de extracción y nebulización industrial, poseen dos principales metas: Salvaguardar la integridad del trabajador en un entorno cerrado, y propiciar el mejor ahorro energético/monetario posible.
La industria metalmecánica abarca una amplia gama de actividades, desde la fabricación de componentes metálicos hasta la reparación y mantenimiento de maquinaria. En estos entornos de trabajo, la exposición a humos y vapores tóxicos es un riesgo significativo para la salud de los trabajadores. Identificar los humos más peligrosos y adoptar soluciones eficaces como los sistemas nebulizadores, así como de extracción y ventilación industrial, es crucial para mitigar estos riesgos.
Humos peligrosos en la industria metalmecánica
Humos de soldadura
Los procesos de soldadura, como la soldadura por arco, MIG, TIG y otros, generan humos que contienen una mezcla de partículas metálicas y gases. Estos humos pueden incluir metales tóxicos como el plomo, el cadmio, el cromo, el níquel y el zinc. La inhalación prolongada de estos humos suele causar enfermedades pulmonares, cáncer y otros problemas de salud graves.
Humos de corte por plasma y láser
El corte de metales mediante plasma y láser produce humos que contienen partículas finas de metal y gases peligrosos, como el ozono y los óxidos de nitrógeno. La exposición a estos humos puede causar irritación respiratoria, daños pulmonares y enfermedades crónicas.
Vapores de recubrimientos y pinturas
Los procesos de recubrimiento y pintura en la industria metalmecánica utilizan solventes y compuestos químicos que emiten vapores tóxicos. Estos vapores suelen contener compuestos orgánicos volátiles (COV), isocianatos y otros químicos peligrosos que llegan a causar problemas respiratorios, irritación ocular y dermatitis.
Humos de tratamiento térmico
Los procesos de tratamiento térmico, como el temple y el revenido, generan humos y vapores que contienen partículas metálicas y gases nocivos. Estos humos pueden causar enfermedades respiratorias y efectos sistémicos debido a la absorción de metales pesados.
Soluciones para el control de humos peligrosos
Sistemas nebulizadores industriales
Los sistemas de nebulización funcionan mediante la dispersión de finas gotas de agua en el aire, lo que ayuda a capturar y asentar las partículas de humo y polvo. Estos sistemas son especialmente eficaces en la reducción de la exposición a partículas en suspensión, mejorando la calidad del aire en el lugar de trabajo. La nebulización también puede ayudar a enfriar el ambiente, lo que es beneficioso en procesos que generan altas temperaturas.
Sistemas de extracción localizada
La extracción localizada, o extracción en la fuente, es una técnica eficaz para controlar los humos peligrosos en el punto donde se generan. Estos sistemas utilizan conductos y campanas de extracción para capturar y remover los humos directamente desde la fuente de emisión antes de que se dispersen en el ambiente de trabajo. Esto no solo protege a los trabajadores, sino que también ayuda a mantener el aire más limpio y seguro.
Sistemas de ventilación industrial
La aireación general, también conocida como aireación dilucional, implica el uso de sistemas de climatización para renovar y diluir el aire en el lugar de trabajo. Este método reduce la concentración de contaminantes en el aire mediante la introducción de aire fresco y la expulsión de aire contaminado. Aunque no es tan eficaz como la extracción localizada para capturar humos directamente en la fuente, la aireación general es esencial para mantener niveles aceptables de calidad del aire en toda la instalación.
Filtros y purificadores de aire
La incorporación de filtros y purificadores de aire en los sistemas de ventilación industrial puede mejorar significativamente la calidad del aire interior. Los filtros HEPA (High Efficiency Particulate Air) y los filtros de carbón activado son especialmente eficaces para capturar partículas finas y eliminar gases y vapores tóxicos. Estos dispositivos deben ser mantenidos y reemplazados regularmente para asegurar su eficacia continua.
Capacitación y concientización
Los trabajadores deben recibir capacitación sobre los riesgos asociados con la exposición a humos y la importancia del uso de equipos de protección personal (EPP) y sistemas de control de humos.
Monitoreo y mantenimiento
Es crucial realizar un monitoreo regular de la calidad del aire y el mantenimiento de los sistemas de control para asegurar su eficacia. Esto incluye la limpieza y reemplazo de filtros y la verificación del correcto funcionamiento de los sistemas de extracción y ventilación industrial.
